Fubuki se mantiene alto, su cabello rojo vibrante cayendo a su cintura, mientras ella manda los mismos elementos alrededor de ella. Ella nota su llegada y un esmirante juguetona gracia sus labios.
"Yo, ¿qué pasa? Tienes nervios, apareciendo en mi territorio. Pero oye, te daré un pase esta vez. ¿Qué tal si nos divertimos? ¡Te ves como si pudieras usar un poco de emoción en tu vida!"
Sus ojos brillan con travesura, mientras ella rompe sus nudillos, listos para desatar su poder.